¡Hola, literatómanos!
¿Qué tal estáis? Yo ya estoy disfrutando del verano en el pueblo, ese lugar donde el tiempo parece fluir de otra manera. Lo único malo es la pésima conexión que tengo, aunque eso va mejorando de un año para otro.
Hoy os traigo un booktag que he visto en el blog
Buscando un Dandy, y que tenía muchísimas ganas de hacer. No sé quién lo ha creado, así que agradecería muchísimo que alguien me lo dijera en los comentarios.
Se trata de una serie de preguntas que nos dan la ocasión de describir nuestros peculiares hábitos de lectura, que siempre permiten darnos a conocer un poquito más. ¡Espero que os guste!
1. ¿Dónde te gusta leer?
Soy de esas capaces de sacar un libro en cualquier sitio, pero, puestos a elegir, prefiero leer en mi cuarto, en las madrugadas lluviosas en las que es difícil conciliar el sueño. En estos momentos únicos parece que, más que leer el libro, este te susurra su historia al oído. ¡Es sumamente inspirador!
También me gusta leer a la sombra en los días calurosos de verano, en la orilla del mar o de un lago o río. Es muy relajante.
2. ¿Marcapáginas o cualquier cosa?
Yo era de cualquier cosa, hasta que, en diciembre, me regalaron un marcapáginas precioso por mi cumpleaños, y ahora intento utilizarlo siempre que puedo.
Sin embargo, dada mi marcada tendencia al despiste, suelo olvidarlo y acabo recurriendo a lo primero que encuentro, bien sea un trozo de papel, una hoja de publicidad de esas que dejan en los coches o una ramita de algún árbol cercano. Todo vale, mientras no deje marcas permanentes en el libro.
3. ¿Puedes parar de leer en cualquier página o tienes que leer un número determinado de páginas?
No me gusta dejar un capítulo a medias, y, en las contadas ocasiones en las que me veo obligada a hacerlo, no me quedo tranquila hasta que retomo el libro y acabo el capítulo. Por esa razón, uno de mis típicos errores es empezar un nuevo capítulo cuando estoy muy cansada, sin pensar lo largo que podría ser. Y, claro, ¡luego no puedo parar!
4. ¿Comes o bebes mientras lees?
No es lo más habitual, aunque muchas veces leo mientras me tomo el típico café de mediodía, sustituible por una infusión de regaliz. Es muy relajante, pero tampoco puedes bajar la guardia en ningún momento, no vaya a ser que el libro acabe manchado y con algún párrafo ilegible, lo que sería, a todas luces, una catástrofe.
5. ¿Ves la televisión o escuchas música mientras lees?
Ver, lo que se dice ver la televisión, no. Puede estar el televisor de fondo mientras leo, o bien puedo tener un libro en la mano mientras miro la pantalla, pero al final siempre me acabo centrando en una cosa o en otra.
En cuanto a la música, definitivamente sí, casi siempre, porque estoy acostumbrada a vivir con la música encendida y, además, me parece que le aporta un matiz especial al libro. Al libro, y a la vida en general.
6. ¿Cuántas novelas lees a la vez?
¡Una y no más! Cada vez que intento leer más de una al mismo tiempo, hay una que acaba acaparando toda mi atención y las demás se quedan esperando muertas de risa con cualquier objeto cercano entre las primeras hojas a modo de marcapáginas.
Solo he tenido varias empezadas a la vez cuando he tenido que aparcar una novela demasiado profunda para intercalarla con una ligera por culpa de los exámenes o el estrés.
7. ¿Lees en voz alta o en tu cabeza?
En mi cabeza (por fortuna para la salud mental y confort de familiares y vecinos).
Aunque, de vez en cuando, cuando estoy sola en casa, no resisto la tentación de leer algún párrafo en voz alta y pausada, como si se lo estuviese contando a alguien. Y la verdad es que es un momento que se disfruta mucho, además de ser de gran ayuda a la hora de vocalizar.
8. ¿Lees adelantados o saltas capítulos?
Llegados a este punto, he de hacer una confesión: de vez en cuando, no soy capaz de resistirme y me leo las últimas hojas de un libro antes de terminarlo. Luego lo sigo leyendo normalmente, pero es una forma perfecta de tragarme un spoiler sin necesidad de que venga algún desafortunado a contármelo.
9. ¿Romper el lomo o dejarlo como nuevo?
Me gusta cuidar de mis libros, pero no pasa un verano sin que alguno de ellos acabe con algunas de sus páginas cubiertas de marcas por haberse mojado. Este año, le ha tocado el turno a La sombra del viento, de Carlos Ruiz Zafón. Por fortuna, después del primero, le pillo el truco a lo de leer en zonas de baño y logro mantener al resto a salvo.
10. ¿Escribes en tus libros?
No, no escribo en los libros, me gusta que queden casi intactos, porque, al fin y al cabo, los libros no tienen dueño. Sin embargo, hay algo romántico en esos libros de segunda mano que aparecen en algunas novelas y películas y están cubiertos de notas a lápiz por las cuales se puede ir rememorando la vida de su antiguo poseedor.
Y esto es todo por hoy. ¡Espero que os haya gustado el Tag, y todos sois bienvenidos a hacerlo en vuestro blog, si queréis! Como siempre, os invito a comentar si coincidimos en algo, si tenéis algún hábito de lectura extravagante...
¡Hasta pronto, literatómanos!