¡Hola, literatómanos!
¿Qué tal estáis? ¡Espero que os vaya muy bien!
¿Qué tal estáis? ¡Espero que os vaya muy bien!
Yo estoy muy falta de tiempo, y, entre estudios y otras cosas, últimamente saco pocos ratos incluso para leer. ¡Muchas gracias a todos los que lo entendéis!
Sin ir más lejos, he tardado bastante más de lo normal en acabar este libro, ¡pero eso no quita que me haya encantado! A continuación, os dejo la Reseña.
Título: La Luna no está.
Autor: Nathan Filer.
Traductora: Catalina Martínez Muñoz.
Editorial: Alianza Literaria.
Título original: The Shock of the Fall (inglés).
Fecha de publicación: 2013.
Número de páginas: 307.
La vida puede cambiar vertiginosamente en pocos segundos. Matthew Holmes tiene nueve años. Nunca se separa de su hermano mayor, Simon, al que todos tratan como si fuera menor por una enfermedad cuyo nombre Matt no recuerda. Durante unas vacaciiones en ocean Coves, Simon muere de forma accidental tras salir con Matt una noche de la caravana familiar para curiosear por los alrededores. Es algo que Matt nunca podrá olvidar y que le lleva a encerrarse en sí mismo.
Diez años después, Matt encuentra fuerzas para volver a empezar. Su gran ayuda es la abuela Noos, pero sobre todo Anabelle, y el recuerdo de Simon que "tenía una cara grande y redonda, siempre sonriente como la Luna".
Esta novela merece la pena leerla. Merece la pena dedicarle un rato, e intentar comprender, pese a que a veces parece muy difícil. La novela se introduce, en primera persona, en la mente de Matthew Holmes, un joven de 19 años que padece una severa enfermedad mental.
Resulta fácil decirlo... Mucha gente podría narrar la historia de una persona, pero muy poca podría describir el mundo tal y como lo ve un esquizofrénico. Normalmente, empezaría la reseña hablando de la historia y del argumento, pero esta vez es imprescindible subrayar la capacidad narrativa del autor. Transmite mucho sin grandes aspavientos, sin utilizar increíbles recursos retóricos. Es como poder ver a través de los ojos del protagonista, tener la sensación de entenderle. ¡Una maravilla!
La historia, por otro lado, es desgarradora. Huye totalmente de la figura, muchas veces banalizada y llena de estereotipos, del enfermo mental idílico y nos muestra la verdadera realidad. Matthew Holmes tiene 19 años, aunque muchas veces da la impresión de tener unos cuantos más, y escribe sus memorias entre un hospital psiquiátrico y un piso destartalado. En ellas podemos leer su vida, una joya para los amantes de las historias enrevesadas y conmovedoras.
Matthew pasó una infancia condicionado por su hermano Simon, un adorable chaval con síndrome de Down, y el impacto que causó su muerte, no solo en él, sino en todo su mundo. Desde entonces, las obsesiones, las manías y el aislamiento se convierten en constantes en su vida, y van gestando, lentamente, una enfermedad terrible.
En cuanto al resto de personajes, me ha gustado bastante la Abuela Noo, un personaje sencillo y humano que a todos nos recuerda a alguien muy especial, así como Jacob. La madre de Matthew es otro personaje que también da para tener su propia novela. Aunque, de todos modos, no puedo decir mucho más, porque todas sus historias están incompletas. El libro se centra demasiado en el protagonista, y eso no me ha gustado tanto. Además, la parte final de la novela está llena de flashbacks, de saltos en un período de tiempo no muy bien detallado, lo que resulta bastante complicado de leer.
En resumen, leer esta novela significa introducirse en la mente de un enfermo mental, tal y como es. Si estás buscando una novela chorreante de adrenalina y acción, no es para ti, pero sí se trata de un libro idóneo para aquellos que quieran algo diferente. Si alguien lo lee, ¡que no olvide mantener su mente lo más abierta posible!
Y esto es todo por hoy. Espero que os haya gustado y, como siempre, os invito a comentar si habéis leído el libro u algún otro similar, si os interesa hacerlo...
¡Hasta pronto, literatómanos!
Soy yo, el mismo de siempre, el mismo del que no puedo escapar.